Concurso de acreedores sin masa: alternativa rápida y efectiva

La entrada en vigor de la reforma de la Ley Concursal en septiembre de 2022 ha marcado un hito en el sistema concursal español, introduciendo el concurso de acreedores sin masa como una alternativa clave para las empresas en situación de insolvencia. Esta modalidad, regida por los artículos 37 bis y siguientes, se presenta como una solución ágil y eficiente para aquellas compañías que enfrentan deudas inviables y carecen de activos para hacer frente a sus obligaciones.

La transformación: De concurso express a sin masa

Anteriormente conocido como concurso express, el concurso de acreedores sin masa ha experimentado una metamorfosis significativa con la reforma de la Ley Concursal en 2022. Esta evolución se ha llevado a cabo en consonancia con la transposición de la Directiva Europea 2019/1023 de reestructuración e insolvencia, marcando un cambio profundo en el panorama concursal español.

Características del concurso sin masa

  1. Procedimiento simplificado: El concurso sin masa se presenta como un procedimiento más rápido y sencillo en comparación con el concurso de acreedores ordinario. Este enfoque expedito permite a las sociedades mercantiles en situación de insolvencia cesar su actividad y disolverse, incluso manteniendo deudas pendientes con sus acreedores.
  2. Menor duración y costo: La agilidad es una de las principales ventajas del concurso sin masa. Su duración reducida y menor coste en comparación con los procedimientos convencionales facilitan a las empresas una solución eficaz para poner fin a su actividad sin incurrir en prolongadas gestiones y costos asociados.
  3. Posibilidad de reinicio: Cerrar y disolver la empresa sin la necesidad de saldar completamente las deudas pendientes brinda a las compañías la oportunidad de empezar de nuevo desde cero. Evitar demandas de acreedores, gestiones de recobro de deudas y situaciones de morosidad se convierte en un impulso para un nuevo comienzo.

Requisitos para iniciar un concurso sin masa

Para llevar a cabo un concurso sin masa, es crucial que se cumplan ciertos requisitos:

  1. Ausencia de bienes embargables: El concursado debe carecer de bienes y derechos que sean legalmente embargables, lo que establece las bases para la aplicación de este procedimiento.
  2. Desproporción manifiesta de costos: El coste de realizar los bienes y derechos del concursado debe ser manifiestamente desproporcionado en comparación con el previsible valor venal, justificando la elección de este camino simplificado.
  3. Valor inferior de bienes libres de cargas: Los bienes y derechos del concursado, libres de cargas, deben tener un valor inferior al previsible coste del procedimiento, garantizando una proporcionalidad económica en la toma de decisiones.
  4. Cargas y gravámenes: Los gravámenes y cargas existentes sobre los bienes y derechos del concursado deben superar el valor de mercado de dichos activos, consolidando la inviabilidad de un proceso tradicional.

Conclusiones

En resumen, el concurso de acreedores sin masa se erige como una herramienta eficaz para las empresas en situación de insolvencia que buscan una salida rápida y eficiente. La flexibilidad de este enfoque, respaldado por la reforma de la Ley Concursal de 2022, redefine el panorama para las compañías que enfrentan deudas abrumadoras sin activos disponibles. Si eres persona física quizás te interese la Ley de la Segunda Oportunidad. ¿Necesitas asesoramiento legal? Nosotros podemos ayudarte ¡contáctanos ahora mismo! Estamos en todas las ciudades de España, incluyendo Valencia, A Coruña, Bilbao, Madrid, Málaga, Sevilla, Barcelona, entre otras.