Créditos ordinarios: definición, clasificación y aplicación de la ley de segunda oportunidad

Introducción:

Los créditos ordinarios, originados por préstamos sin garantías asociadas, representan la mayoría de las deudas contraídas con bancos y entidades financieras. En este artículo, exploraremos la definición, clasificación según la ley concursal, el orden de cobro en caso de mora, y la aplicación de la Ley de Segunda Oportunidad.

¿Qué son los créditos ordinarios? 

Según el artículo 269 del Texto Refundido de la Ley Concursal (2020), los créditos ordinarios son aquellos que no tienen la clasificación de privilegiados o subordinados. Esta clasificación es crucial, ya que determina el orden de cobro en procesos concursales. Cabe destacar que todas las deudas prescriben, pero con plazos y condiciones específicas.

Orden de cobro en caso de mora 

En situaciones de mora, todos los tipos de crédito acumulan intereses. Los créditos subordinados, que incluyen intereses de mora, son los últimos en ser cobrados en procesos concursales. Se priorizan los créditos privilegiados y luego los ordinarios.

Tipos de créditos

Algunos ejemplos incluyen préstamos personales, tarjetas de crédito, préstamos preconcedidos, facturas, seguros, deudas corrientes con proveedores, préstamos financieros online, microcréditos y reunificaciones de deuda sin garantía.

Ley de Segunda Oportunidad 

La Ley de Segunda Oportunidad, introducida en España en 2015, ofrece la posibilidad de reestructurar o eximir del pago de deudas a personas insolventes. En 2022, se amplió su aplicabilidad a deudas de créditos ordinarios, como préstamos personales, tarjetas de crédito, microcréditos, facturas y deudas con proveedores, así como hipotecas y deudas con Hacienda y la Seguridad Social de hasta 10.000 euros.

Conclusión:

Comprender la naturaleza y clasificación es esencial para quienes enfrentan deudas y buscan soluciones legales. La Ley de Segunda Oportunidad proporciona una vía para aliviar la carga financiera, especialmente en estos casos.


¿Qué es la insolvencia?

¿Qué es la insolvencia? Es un estado patrimonial que obstaculiza el cumplimiento de obligaciones debido a la falta de medios líquidos, es una situación crucial en el ámbito financiero.

La perspectiva de la Real Academia Española (RAE)

Según la RAE, se define como la «falta de solvencia, incapacidad para pagar una deuda,» convirtiéndose en uno de los motivos principales para solicitar el concurso de acreedores.

Tipos y sus características

Se clasifica en dos tipos según el patrimonio del deudor: la insolvencia actual, donde el deudor no puede cumplir con obligaciones exigibles, y la insolvencia inminente, que se anticipa a futuras obligaciones.

Clasificación en diferentes procesos jurídicos

La declaración de insolvencia en el proceso civil

La satisfacción de las reclamaciones de acreedores da origen al concurso, que puede ser solicitado por los acreedores o, en casos de insolvencia actual, obligatoriamente por el deudor.

La declaración de insolvente en el proceso penal

La no solicitud voluntaria del concurso puede llevar al deudor a cometer el delito de insolvencia punible, regulado por el artículo 259 del Código Penal.

Resolución judicial y sus tipos

La resolución judicial distingue entre la insolvencia provisional, resoluble con iliquidez temporal, y la insolvencia definitiva, cuando el deudor no cuenta con bienes suficientes a corto, medio y largo plazo.

Según el tipo de deudor

De tipo empresarial

Regulada por el Texto Refundido de la Ley Concursal, puede conducir a acuerdos con acreedores o a la quiebra de la empresa.

De personas físicas y autónomos

La Ley de Segunda Oportunidad permite a particulares y autónomos renegociar o cancelar deudas, exigiendo la demostración del estado de insolvencia según el artículo 2 de la Ley 22/2003.

La Ley de la Segunda Oportunidad y su aplicación práctica

La Ley de la Segunda Oportunidad (Ley 25/2015) ofrece un mecanismo para que personas físicas reestructuren sus deudas, ayudándolas a reintegrarse en la economía del país.

Estrategias para evitar la quiebra

La no definitiva puede activar mecanismos como la realización de activos, acuerdos preconcursales y capitalización, permitiendo a la empresa enfrentar sus obligaciones y asegurar su continuidad.

Esta Ley te permite librarte de todas tus deudas, si crees que necesitas ayuda te recomendamos buscar asesoramiento legal.


Guía actualizada sobre la Ley de Segunda Oportunidad: Mecanismo para superar deudas

La Ley de Segunda Oportunidad, también conocida como Mecanismo de Segunda Oportunidad, es un recurso legal diseñado para permitir a individuos cancelar total o parcialmente deudas y recuperarse tras situaciones de insolvencia financiera. Esta guía te proporcionará información clave sobre esta legislación, sus requisitos y el proceso para acogerse a ella.

I. Marco Legal de la Ley de Segunda Oportunidad

Ley de Segunda Oportunidad (Ley 25/2015): Esta ley, aprobada el 28 de julio de 2015, establece el Mecanismo de Segunda Oportunidad y otras medidas sociales. Su objetivo es facilitar a personas físicas superar fracasos económicos sin arrastrar indefinidamente deudas impagables.

Real Decreto Legislativo 1/2020: Aprueba el texto refundido de la Ley Concursal, donde también se regula el Mecanismo de Segunda Oportunidad.

II. Objetivo de la Ley de Segunda Oportunidad

La exposición de motivos de la Ley destaca su propósito de permitir a personas físicas reorientar sus vidas tras dificultades financieras, al tiempo que protege los derechos de los acreedores. Busca un equilibrio donde los deudores puedan recuperarse y los acreedores recuperen parte de sus deudas.

III. ¿Quién Puede Acogerse? Requisitos Clave

La Ley está dirigida a particulares y autónomos. Para beneficiarse de ella, es necesario cumplir con ciertos requisitos:

Tener deudas con al menos dos acreedores distintos, incluyendo entidades financieras, administraciones públicas, proveedores, etc.

Ser insolvente y demostrar la falta de patrimonio suficiente para afrontar las deudas.

Acreditar buena fe en la contracción de deudas.

Si ya se acogió anteriormente a la Ley, deben haber pasado al menos cinco años (dos años si se obtuvo exoneración del pasivo insatisfecho mediante plan de pagos).

IV. Deudor de Buena Fe

La Ley no especifica la buena fe, pero se excluyen casos como condenas por delitos económicos en los últimos diez años. No se considera buena fe si el concurso fue declarado culpable, demostrando que el deudor contrajo deudas consciente de no poder pagarlas.

V. Funcionamiento del Proceso

El procedimiento para acogerse a la Ley ha experimentado cambios recientes, agilizando el proceso:

Recopilación de Documentación: Se debe reunir la documentación que demuestre la insolvencia y la situación financiera del deudor.

Solicitud en el Juzgado de lo Mercantil: Puede presentarse directamente en el Juzgado, eliminando la necesidad de trámites notariales previos.

Modalidades de Cancelación:

Cancelación Total con Liquidación de Patrimonio: Deudas eliminadas a cambio de liquidar todo el patrimonio.

Cancelación Parcial con Plan de Pagos: Parte de las deudas se cancela, y se establece un plan de pagos para el resto.

Excepciones en la Cancelación Total: Algunas deudas, como pensión de alimentos, no son cancelables. Con la reforma, deudas con Hacienda y Seguridad Social por encima de 10,000 euros pueden cancelarse hasta dicho límite.

Plan de Pagos en la Cancelación Parcial: El juez determina qué porcentaje de deudas puede asumir el deudor y establece un plan de pagos de 3 a 5 años. Cumplir con el plan convierte las deudas provisionalmente canceladas en definitivamente canceladas.


VI. ¿Necesitas Ayuda?

Somos abogados especialistas en la Ley de Segunda Oportunidad. Contacta con nosotros para obtener asesoramiento sin compromiso.

Esta guía te ofrece una visión general de la Ley de Segunda Oportunidad. Para casos específicos, se recomienda buscar asesoramiento legal.